Y cuál es la función de cada uno de ellos
En muchas ocasiones cuando nos enfrentamos al proceso de creación de un packaging lo hacemos desde tres frentes diferentes dependiendo del tipo de producto, y esto puede hacernos trabajar los tres tipos de packaging que existen para un mismo producto dependiendo de las características de este.
Por ejemplo, piensa que necesitas un packaging para un tetrabrik de leche, este primer packaging que está en contacto directo con el producto, la leche, es el packaging primario.
El packaging secundario es aquel que agrupa seis tetrabriks de leche en una misma caja pensada para facilitar al consumidor su transporte con un asa o como formato ahorro.
Y, por último, el packaging terciario es aquel en el que agrupamos varios packagings secundarios, para ser transportados, distribuidos y almacenados en los diferentes puntos de venta.
Es importante mantener una coherencia gráfica y corporativa en los tres.
En resumen, el packaging primario es el primer envoltorio, está en contacto directo con el producto. El secundario envuelve al packaging primario, para agruparlo o darle mayor protección y el terciario agrupa varios packagings para facilitar su transporte y almacenaje.
Consejo profesional
A la hora de coordinar los distintos tipos de packaging, tenemos que comprobar que cada uno cumpla con su función.